Como muchas personas ya saben, la figura del psicólogo ya existe en los centros educativos, aunque muchas veces no es un psicólogo quien la ejerce y no siempre se centran en la atención individualizada por el volumen de alumnos/as que tienen. En la actualidad esta figura se llama orientador educativo, y sus funciones son identificar necesidades en el alumnado, orientar, asesorar tanto a los alumnos como a sus familias y coordinarse con otros recursos.

Durante varios años, Aliara Psicología lleva impartiendo diversos talleres psicoeducativos en diferentes centros tanto en los ciclos de primaria como en secundaria. Estos talleres suelen tener una duración de entre 3 y 5 días y resultan muy útiles para poder tener una visión teórico-práctica de aspectos como la inteligencia emocional, las habilidades sociales, toma de decisiones, sexualidad en la adolescencia, las adicciones, la violencia de género, etc. Pero a lo largo de estos talleres percibíamos la necesidad de realizar una atención más individualizada con algunos de los alumnos. Por ello, en esta entrada os queremos hablar de un proyecto que hemos realizado en diferentes centros educativos y que tiene una duración más prolongada e individualizada: la atención psicológica a alumnos. Este recurso se propone sobre todo para el alumnado que no tiene posibilidad económica de poder acudir a un psicólogo con la frecuencia necesaria (1 vez por semana) y presenta dificultades en diferentes áreas de su vida como pueden ser: ansiedad, dificultades asumir y establecer límites, problemas de conducta, dificultades en las habilidades sociales, dificultades en la comunicación y expresión emocional, dificultades para establecer conductas y hábitos de autocuidado, dificultades en la identificación y gestión emocional, dificultades en la resolución de conflictos tanto familiares como sociales entre otros. De esta manera, se le proporciona el recurso de atención psicológica que funciona de la misma manera que si lo se abordara de manera privada, pero con el beneficio de realizarse en el horario escolar (1 hora a la semana en clases pactadas con el equipo directivo) y sin coste económico para el alumnado ni su familia.

Centrándonos en la pregunta que aparece en el título: ¿es necesario un psicólogo en el centro educativo? La respuesta desde el equipo de Aliara y tras la experiencia en estos centros es SI. A lo largo de estos años hemos detectado una alta demanda de este recurso y de la necesidad que tienen los alumnos (sobre todo en secundaria) de poder contar con una figura que los acompañe en su proceso de crecimiento, desarrollo y creación de su propia personalidad. Muchas veces se sienten perdidos y sin herramientas ni recursos para hacer frente a las dificultades que les van apareciendo, y que en muchos de los casos no son pocas. Se han detectado mejoras significativas en la mayor parte del alumnado que formaba parte del recurso y la verbalización de la necesidad de contar con este recurso.

La atención psicológica en edades escolares es una inversión en salud mental y en el futuro de estas personas que están aun formándose su propia psicología. Los alumnos se encuentran en una etapa de desarrollo en la que además de orientarles, asesórales e identificar qué dificultades psicopedagógicas están pudiendo tener, algunos de ellos requieren una atención individualizada y continua para que la intervención tenga efectos a medio/largo plazo y puedan existir cambios de hábitos, aprendizajes y obtención de herramientas para su presente y futuro. 

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